jueves, 8 de abril de 2010

In memoriam

Hoy es un día triste para mi. Mi amigo del alma, ese que nunca me ha fallado desde que tenía 14 años nos ha dejado.
Se ha ido después de 16 años entre nosotros. Bobby siempre te recordaré.

Hoy, cuando me ha llamado mi madre para darme esta noticia, sólo podía decirme a mi misma que era lo mejor, era ya muy mayor, estos últimos días ha estado muy triste, pero aún así no he podido consolarme. He llorado, horas y horas, recordando a mi pequeño amigo y esos momentos con él.
Después de tanto tiempo, creo que es normal haberle acogido tanto cariño, sobre todo quererlo como se merecía.

Acabo de recordar el momento en que nos conocimos. Era en diciembre, y yo estaba en la sala de estar, sola. Mi padre llega a casa y me grita desde la puerta:
- Patri, ¿dónde estás?
Yo le contesto y acto seguido empiezo a oir un ruido muy raro. Abro la puerta de la sala y allí está, moviendo la cola, él, Bobby.
Mi padre lo había recogido, alguien abandonó a este pobre perro, era pequeño, estaba super sucio y no era de raza, pero era mi perro. Mi amigo.

Aunque en un principio mi madre no lo quería en casa, en el momento que conocimos a ese pequeñajo nos robó el corazón, y hasta hoy ha sido un amigo fiel. Tanto que en su última etapa, ayudó a que la casa de mis padres no se incendiara.

Amigo esto es por ti!

Nunca te olvidaré